Repasamos las últimas tecnologías utilizadas en 2022 para mejorar el rendimiento y calidad de los cultivos de tomate en invernadero
El uso de nuevas tecnologías en invernadero y los recientes avances en horticultura siguen transformando la producción de alimentos en todo el mundo. Los productores de tomate en invernadero están invirtiendo en varias tecnologías emergentes para conseguir mayor rendimiento y una calidad del fruto sin precedentes.
La demanda de tomates frescos de invernadero sigue siendo fuerte debido a la constancia en su alta calidad. Para aumentar aún más las ventas, algunos productores han ampliado sus variedades a tomates tipo heirloom o asurcado, cherry y cocktail. Los tomates rama también siguen siendo muy populares, haciendo honor a su nombre, estos tomates se cosechan en ramos, lo que les confiere un atractivo estético junto con una frescura y un sabor óptimos.
Los retos a los que se enfrentan los agricultores de tomate en invernadero han evolucionado en cierta medida. Los requisitos generales de energía y calor, especialmente en los climas septentrionales, siguen siendo una preocupación, pero el uso de energía ha disminuido considerablemente con la llegada de la tecnología LED.
Los patógenos son otra de las preocupaciones constantes en la gestión de los invernaderos. La transpiración de las grandes plantas de tomate en los invernaderos provoca un nivel alto humedad dentro de la estructura que favorece el crecimiento de enfermedades causadas por diversos hongos, bacterias y virus. El sistema de recirculación de agua del invernadero también puede albergar diversas enfermedades. Algunas de las enfermedades actuales del tomate de invernadero son el moho del agua, la mancha bacteriana o bacteria spot, el marchitamiento bacteriano, el cancro bacteriano o bacteria canker, el moho gris de la Botrytis, la pudrición del tallo por Pythium y la mancha foliar blanca, entre otras.
Afortunadamente, las tecnologías innovadoras de los invernaderos están ayudando a los productores a hacer frente a estos continuos desafíos, y algunas soluciones abordan simultáneamente varios puntos problemáticos.
(iA) iNTELIGENCIA ARTIFICIAL
Existe varias empresas que ofrecen sistemas avanzados de gestión de invernaderos que se acercan, o pueden considerarse realmente, inteligencia artificial (IA). Son capaces de analizar grandes cantidades de datos de sensores en tiempo real como la temperatura, la humedad, el espectro luminoso, la intensidad de la luz, la calidad del agua y mucho más. A partir de este análisis, la IA ajusta automáticamente el espectro, la intensidad o el ángulo de la luz, la ventilación, las ventanas y otros elementos del invernadero para conseguir el mejor rendimiento posible del cultivo. Por lo tanto, además de conseguir una mayor calidad y un mayor rendimiento, los agricultores que utilizan estos sistemas también se benefician de un pequeño ahorro en el uso de la energía.
Con el tiempo, un sistema de IA podrá utilizarse para predecir las necesidades del cultivo en su invernadero específico, utilizando las enormes cantidades de datos capturados y analizados a lo largo del tiempo. Además, estos avanzados sistemas de software permiten organizar mejor la mano de obra y, por tanto, hacerla más eficiente.
TECNOLOGÍA AVANZADA PARA INVERNADEROS: robot COSECHADOR DE TOMATES
Para hacer frente a la creciente preocupación por la mano de obra, muchos proveedores de tecnología han lanzado recientemente cosechadoras robóticas para cultivos de invernadero y muchos más están cerca de la comercialización.
Desde 2020, AppHarvest ha puesto en marcha su sistema robotizado de gestión y recolección de cultivos en su planta de Kentucky, donde 700.000 plantas producen más de 20.400 toneladas de tomates al año. Los robots se mueven de fila en fila, utilizando la visión artificial para evaluar qué tomates están lo suficientemente maduros para ser recolectados. El brazo cortador recoge los tomates correspondientes en un contenedor y los transporta automáticamente a una ubicación central para su envasado.
NANOBURBUJAS: CIENCIA Y TECNOLOGÍA HORTÍCOLA SOSTENIBLE SIN PRODUCTOS QUÍMICOS
Con las nuevas políticas de sostenibilidad y la importancia de la lucha contra el cambio climático, los productores de tomate están buscando tecnología AgTech emergentes para reducir la dependencia de los pesticidas y otros productos químicos, mejorar la eficiencia del uso del agua de riego y aumentar la producción de los cultivos. La tecnología de nanoburbujas es un método sostenible y sin productos químicos para mejorar el agua de riego de forma natural.
Esta tecnología que inyecta nanoburbujas en el agua de riego es un método excelente de mejora del agua que previene y reduce patógenos como Phytophthora y Pythium, y además, elimina el biofilm y la acumulación de minerales para mejorar la higiene del sistema de riego. La sobresaturación de oxígeno disuelto en el agua de riego mejora la disponibilidad de oxígeno y el transporte de nutrientes en la zona de las raíces. Por lo tanto, las propiedades únicas de las nanoburbujas de Moleaer contribuyen a mejorar el rendimiento y la calidad de la cosecha.
Las nanoburbujas tienen menos de 200 nanómetros de diámetro y poseen propiedades que les permiten oxigenar todas las partes del sistema de agua, a la vez que aportan otros beneficios. Los generadores de nanoburbujas de Moleaer se utilizan actualmente en más de 500 invernaderos de todo el mundo, y pueden inyectar dos formas de oxígeno: oxígeno disuelto (OD) y nanoburbujas que contienen oxígeno.
En los ensayos con tomates en invernadero realizados en la estación de investigación de producción de hortalizas ‘Sint-Katelijne-Waver’ ubicada en Bélgica, la tecnología de Moleaer logró niveles continuos de OD de 25 mg/l y un aumento del 10% en la producción de tomates. Durante el periodo de cosecha de dos meses, las plantas que recibieron agua inyectada con nanoburbujas produjeron una media de 13,2 kg/m² en comparación con los 12,0 kg/m² producidos por las plantas que recibieron agua oxigenada con un método tradicional (DO 9 mg/l).
Polinización asistida para aumentar el rendimiento de los cultivos en el interior
Las plantas de tomate deben auto-polinizarse, y el limitado movimiento del aire y la alta humedad plantean retos adicionales para la fertilización de las plantas de tomate de invernadero. Muchos productores utilizan colmenas de abejorros para polinizar, o los propios trabajadores utilizan dispositivos de soplado o hacen vibrar los racimos de flores una o más veces al día para liberar suficiente polen para la polinización.
Un nuevo sistema automatizado utiliza la Inteligencia Artificial (IA) para identificar las flores de tomate listas para la polinización y, a continuación, envía pulsos de aire que hacen vibrar las flores e imitar la polinización por zumbido que realizan de forma natural los abejorros.
A medida que la población mundial crece, la demanda de tomates frescos seguirá aumentando. Corresponde a los productores de invernadero comprender cómo las innovadoras tecnologías AgTech pueden prevenir enfermedades y garantizar un alto rendimiento y un fruto de alta calidad mediante una oxigenación de las raíces muy elevada, así como otros aspectos de la producción que favorecen la salud de las plantas y su crecimiento vigoroso.